James Turrell es reconocido por sus instalaciones experienciales, donde la luz y el espacio desempeñan un papel esencial. Dio inicio a su trabajo en el sur de California en la década de 1960 y durante más de cinco décadas, ha investigado la percepción y la inmersión. Con formación en psicología y una profunda pasión por la aviación, encuentra inspiración en la luz y su capacidad para oscurecer, resaltar, dividir y modelar el entorno. Muchas de sus instalaciones crean condiciones de iluminación difusas y coloridas, que transforman los espacios construidos y modifican la percepción del espectador. Turrell describe la experiencia de su obra como "la materialidad de la luz misma". Su enfoque permite que cada individuo perciba una realidad propia, capaz de trascender la abstracción.
-Sophia Figueroa, en Glenstone Field Guide