El sapo americano (Anaxyrus americanus) es el sapo más común de América del Norte y el anfibio más frecuente en Glenstone. Su coloración varía entre marrón, grisáceo y rojizo, y su piel es gruesa, seca y cubierta de verrugas. Este sapo posee una notable capacidad de adaptación, ya que solo requiere aguas poco profundas para reproducirse, vegetación densa para refugiarse y cazar, además de una fuente constante de alimento. No es exigente con su dieta y se alimenta de una gran variedad de insectos, siempre que sean más pequeños que él. Uno de los mejores momentos para avistar sapos es justo después de la lluvia, cuando las lombrices de tierra emergen y los sapos salen en busca de un festín.